LAS NUEVAS
TECNOLOGÍAS Y SU IMPACTO EN LAS EMPRESAS
Las
nuevas tecnologías han modificado nuestro comportamiento a la hora de
relacionarnos y comunicarnos. Han influido en la toma de decisiones
estratégicas y han tenido un impacto muy positivo en la mejora de la gestión de
las empresas hasta convertirse en su mayor aliada.
Gracias
a la tecnología se han mejorado los procesos administrativos, circuitos
logísticos, verificación de datos, puntos importantes que agilizaban la toma de
decisiones… Pero la tecnología ha evolucionado más deprisa y la gran mayoría de
empresas cuyos modelos de negocio son más rígidos, no son capaces de amoldarse
a los cambios tan rápido como sí lo hacen los avances tecnológicos.
Las
grandes compañías, cuyos recursos económicos son superiores a las de las PYMES,
han realizado inversiones enormes en sistemas con tal de seguir mejorando y
automatizando sus procesos de manera que cada vez más consigan mayores
beneficios y prontos retornos de inversión.
Hoy
el precio de adquisición de la tecnología ha disminuido siendo accesible
para todo el mundo, pero a la vez, el nivel de gestión de las aplicaciones y
nuestras exigencias de información a los sistemas ha provocado que lo que
realmente hoy es caro sea el mantenimiento de dichas aplicaciones, de los
sistemas, que siempre esté todo disponible al usuario y es en ese punto cuando
la tecnología pasa de ser una aliada a ser nuestro mayor enemigo.
En
búsqueda de la mejor solución nació el término Cloud Computing, trabajar en la
nube. Desprenderse de todo aquello que nos ata físicamente a nuestro puesto de
trabajo y nos impide flexibilidad. Además, a la velocidad que van los avances
tecnológicos se cree totalmente innecesario invertir en infraestructura. Nace
el concepto pagar por uso.
Estos
conceptos (trabajar en la nube, pagar por uso), han revolucionado cómo concebimos
las tecnologías. La gestión y administración y el potencial de las máquinas han
vuelto a modificar nuestro concepto y percepción que teníamos sobre la
tecnología.
Debemos
distinguir entre lo necesario y lo accesorio.
La
información es necesaria, mantener su infraestructura para obtener esa
información, completamente accesorio.
La
situación económica actual nos obliga a tomar decisiones que nos permitan ser
competitivos, pero sin que ello nos suponga un elevado esfuerzo económico y
para ello debemos enfocar todos nuestros esfuerzos únicamente a generar valor.
Subir
a la nube nuestra infraestructura tecnológica es una decisión completamente
estratégica y segura. Destinar el equipo técnico del departamento de sistemas a
generar desarrollos en lugar de mantener los sistemas, es una apuesta segura
por la generación de valor.
Desde
la nube, los equipos son mantenidos de manera eficiente y mucho más segura.
Las
empresas, al no tener que mantener personalmente los equipos, reducen los
costes directos asociados a ese mantenimiento y además, hay otros costes,
conocidos como costes ocultos, porque aunque aparezcan en el balance, son
difíciles de identificar, que también desaparecen o por lo menos, tienden a
cero.
Se
eliminan las inversiones en tecnología (principalmente en Hardware) y en lo
relacionado al software, sólo se paga por uso.
Con
esta concepción de los sistemas, el sistema empresarial pasa de ser rígido a
mucho más flexible ya que no se ve sometido a tener que realizar inversiones ni
amortizar equipos. Las empresas pasan a sólo pagar por uso, y ampliar o reducir
ese uso, en función de las necesidades de cada momento.
Adicionalmente,
no es necesario disponer de un espacio físico para desarrollar la actividad. Al
funcionar de forma remota (contra el servidor que está en la nube), se puede
acceder desde cualquier lugar del mundo con un único requisito: Conexión a
internet.
Esta
flexibilidad a la hora de ejercer las tareas propias del día a día, son
beneficiosas, tanto para el trabajador como para la empresa.
Se
facilita la conciliación laboral y familiar, lo cual produce un efecto
inmediato en el incremento de productividad.
Se
eliminan muchas barreras como las territoriales. Al igual que el móvil que
permite que a uno lo localicen independientemente de dónde este, con los
accesos remotos, incluso las franjas horarias desaparecen. El sistema está
siempre disponible.
Pero
existen otros beneficios, como el medio ambiental. Al externalizar los sistemas
de información, las necesidades básicas para su mantenimiento desaparecen:
básicamente aire acondicionado y electricidad, con sus correspondientes
emisiones. Al igual que las emisiones de combustible, al no ser indispensable
estar físicamente en la oficina, se reducen los desplazamientos, y por tanto
las emisiones de Co2. Automáticamente ganamos en calidad de vida.
Trabajar
en la nube, Cloud Computing, no es una moda, es una realidad que cada día más
ayuda a millones de empresas a ser más eficientes.
Suba a la nube y
convierta su empresa en una compañía flexible, ágil, segura y comprometida con
el medio ambiente.
Autor: Andrea Perdomo
Tema :Administracion de Empresas
Disponible: http://www.virtualitze.com/blog/?p=87
Consulta: Las nuevas Tecnologias y su impacto en las Empresas
Tema :Administracion de Empresas
Disponible: http://www.virtualitze.com/blog/?p=87
Consulta: Las nuevas Tecnologias y su impacto en las Empresas
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